El hombre oso es un licántropo que puede aparecer bajo la forma de un oso, de un humano o de un híbrido de ambas especies.
Habitan en las aguas de bosques, donde construyen sus alojamientos fortificados para posibles ataques. Estos alojamientos tienen dos salidas secretas por donde sólo pueden escapar en su forma cisne.
La figura del hombre lobo ha sido adaptada en numerosas ocasiones en la cultura preferred, tanto en películas como en sequence de televisión y videojuegos.
El hombre lobo o licántropo es un hombre que se convierte en lobo bajo determinadas circunstancias externas y ajenas a su voluntad aunque según algunos mitos puede transformarse cuando quiera.
Esta creencia en la existencia de clanes y manadas de licántropos ha alimentado la imaginación de muchos escritores y cineastas, quienes han creado historias y películas basadas en esta idea.
Por supuesto, la historia de Manuel Blanco period una invención para tratar de burlar la condena que lo esperaba pero sirve como muestra de que hace poco más de un siglo aún corrían esas leyendas entre la gente.
En relación con este punto de vista está la creencia de que la licantropía puede ser curada; el pecho y estómago del afectado debe ser lavado y raspado, entre otras cosas, y debe ser extraído cualquier objeto que pudiese guardar relación con brujería. El paciente bebe una medicina y el mal deja el cuerpo en forma de gusanos y serpientes. Hay ciertas marcas por las que estos seres "cambiantes" pueden ser reconocidos. Sus ojos son inestables y algunas veces verdes con sombras oscuras de fondo. Él no duerme y luciérnagas salen de su boca. Sus labios permanecen rojos y tiene una larga lengua.
La táctica del hombre lobo es el ataque por sorpresa, acercándose con cuidado y aprovechando sus afilados colmillos para morder y desgarrar a sus víctimas. Un hombre lobo sólo puede ser herido por armas mágicas o de plata.
Los licántropos auténticos tienen absoluto Manage sobre su cuerpo, pueden cambiar de forma a voluntad y no sufren alteraciones con las fases de la luna o la oscuridad.
La licantropía también ha sido relacionada con algunos trastornos mentales, como la esquizofrenia y la paranoia. Estos trastornos pueden causar delirios y alucinaciones, lo que puede llevar a la creencia de que uno se está transformando en un animal.
En el folclore moderno y la ficción el Wendigo encontrado en las historias de muchos de los pueblos algonquinos es a veces considerada equivalent a licántropos, en que aquella gente podría transformarse en ellos. Las leyendas originales varían considerablemente.
En oggy1688 la forma híbrida crecen hasta unos 50 cm por encima de su estatura humana. En su cuerpo aparece el pelaje a rayas de los tigres, sus manos se vuelven garras y su cabeza es totalmente felina. Adquieren todas las ventajas de un tigre salvaje y mantiene la inteligencia de un humano.
De acuerdo a una tercera forma de la creencia, el cuerpo de un ser cambiante es transformado por sí mismo. Una noche, un hombre dejó el campamento donde un grupo se preparaba a pasar la noche; uno de sus compañeros escuchó un ruido sospechoso y disparó hacia la oscuridad.
El origen de la utilización de la plata para acabar con los licántropos está relacionado con la antigua creencia de que este metal poseía propiedades mágicas y de su asociación con la luna.